Fue construida entre el último cuarto del siglo XIV y principios del XV, y es una de las mejores manifestaciones de la arquitectura gótica y neogótica en la cuidad. Fue edificada para consagrar al Apóstol Santiago, patrón de Bilbao.
Es un templo construido en piedra cuya planta es de cruz latina con tres naves en el cuerpo. Lo que más caracteriza a su fachada es, sin duda, el rosetón. En su interior, los pilares son cilíndricos con columnas hasta la bóveda de crucería. El triforio ornamental, es junto con los vitrales (17 ventanales y 3 rosetones) embellecen el edificio.
En el presbiterio se encuentra el altar, sobre 12 columnas que hacen referencia a los 12 apóstoles.
IGLESIA DEL SAGRADO CORAZÓN
Fue construida como templo de culto en Bilbao a finales del siglo XIX y forma parte de la residencia de Los Jesuitas. Por esa razón, se la conoce también como "Iglesia La Residencia". Se encuentra ubicada cerca de la plaza de Don Diego López de Haro, detrás del Corte Inglés.
Al igual que en la Catedral de Santiago de Bilbao, el rosetón es uno de los elementos más característicos de su fachada. También es destacable la combinación entre piedra y ladrillo (material poco habitual en este tipo de construcciones) y, por supuesto, la ausencia de agujas en sus dos torres.
La planta consta de 3 naves, siendo la principal más ancha que las otras dos.
El retablo mayor está dedicado al Sagrado Corazón, y está rodeado por 2 altares laterales; el del Cristo de la Agonía y el de la Sagrada Familia. A finales de Octubre de 2014, el edificio fue rehabilitado tanto por fuera como por dentro, por el deterioro que había sufrido la piedra en la que estaba construido.
La parroquia de San Francisco de Asís (Quinta Parroquia, en Hurtado de Amézaga) es otro claro ejemplo del Neogótico bilbaíno.
Carlos Usandizaga
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